El calentamiento global reducirá a la mitad las tierras aptas para el cultivo de esta planta de aquí a 2050, lo que repercutirá en los precios y la calidad, afectará a más de 120 millones de personas que viven de la industria cafetera, entre ellas algunas de los países más pobres. según un estudio publicado en Australia. El aumento de las temperaturas y las condiciones meteorológicas extremas reducirán el área apta para la producción en torno al 50 por ciento, mermarán la calidad y aumentarán los precios del café para los consumidores. El aumento de las temperaturas y los cambios en los patronos meteorológicos, entre ellos las lluvias, ya están afectando a los cultivos en muchos países clave en la producción de café, como México, Guatemala, Nicaragua, Colombia y Brasil. Estos cambios han aumentado la incidencia de enfermedades y plagas, lo que afecta a los cultivos y su calidad, añade la investigación. El café es una industria que factura globalmente 19.000 millones de dólares. En todo el mundo se consumen a diario más de 2.250 millones de tazas de café y la producción de esta bebida es más de tres veces superior a la de 1960. El 85 % de los 25 millones de agricultores que se dedican al cultivo de café son pequeños propietarios, por lo que están más expuestos al cambio climático. Si no se combate esta situación, los agricultores tendrían que trasladar la producción a zonas reservadas a otros usos, como la conservación de la naturaleza y los bosques. Y para 2080, el café podría haberse extinguido, concluye el estudio.
Fuente: Instituto del Clima de Australia.
http://www.climateinstitute.org.au/coffee.html