“Cuando quieras emprender algo, habrá mucha gente que te dirá que no lo hagas; cuando vean que no pueden detenerte, te dirán cómo tienes que hacerlo; y cuando finalmente vean que lo has logrado, dirán que siempre creyeron en ti”.
John C. Maxwell

Biogas y fertilizantes obtenidos de lodos de una depuradora

Un equipo de AINIA Centro Tecnológico ha demostrado que es posible obtener productos de alto valor comercial, como biometano y biofertilizantes a partir de fuentes no fósiles como son los lodos de depuradora. Estos bioproductos se han obtenido mediante un proceso de tratamiento de los lodos, resultantes de la depuración de las estaciones de tratamiento de aguas residuales, basado en el concepto de biorrefinería. El sistema consiste en un aprovechamiento integral de los residuos orgánicos. Los productos obtenidos ofrecen un rango de posibilidades mucho más amplio en cuanto al abanico de posibles productos, como por ejemplo, compuestos químicos de alto valor, bioenergía, fertilizantes y piensos. En este proyecto, los lodos procedentes de la depuración de aguas residuales (EDAR) han sido la biomasa, que se ha utilizado como materia prima y, los productos que se han obtenido bioenergía y biofertilizantes. Para la obtención de estos productos se ha empleado una tecnología compuesta varios procesos. Entre ellos, la digestión anaerobia que descompone la materia biodegradable que contienen los lodos de depuradora y que genera biogás. También la separación de los elementos sólidos y líquidos del digerido resultante. Estos líquidos se destinan al cultivo de microalgas para obtener una biomasa algal de calidad para uso como biofertilizante. Por último, los elementos sólidos se someten a un proceso de secado avanzado del que se obtiene un biofertilizante seguro higiénicamente, con ajuste deseado del NPK (nitrógeno, fósforo y potasio) y de un alto valor comercial. Con este sistema se da respuesta a algunas de las problemáticas asociadas al tratamiento convencional de estos lodos, como son los costes de transporte de la sustancia húmeda resultante de estos procesos y la posible acumulación en el suelo productivo de microcontaminantes. Se ha conseguido gestionar estos lodos de una forma más sostenible con el medio ambiente, reduciendo las emisiones de gases de efecto invernadero, del consumo fertilizantes inorgánicos, y del riesgo de contaminación microbiológica a suelos y cultivos.

Fuente: Innovaticias